Por: Mtra. Susana Chávez Sosa
Escuela primaria «Nicolás Bravo»
El arte y la literatura
son la emanación moral
de la civilización…
GiosueCarducci
La educación es un reto que debe enfrentarse día con día, y para superarlo, conviene partir de la curiosidad e imaginación propia de los niños que convergen en nuestras aulas y que lanzan una lluvia de ideas, conocimientos, sentimientos y emociones que, como docentes requerimos rescatar para crear los acordes de una bella sinfonía. Especialmente, en el proceso de alfabetización inicial no basta con lograr que los alumnos descifren las grafías, sino que vale la pena ir más allá en la búsqueda del desarrollo de lectores realmente capaces de dialogar con los textos y de transformar la realidad.
Esta propuesta se fundamenta en el Plan y Programas de Estudio 2011 y en la Estrategia Nacional 11 + 5, específicamente parte de la actividad permanente Círculo de lectores en el aula, misma que propone identificar 10 libros y comprometernos a leer uno cada mes. Es así como implementé este círculo de lectores, rescatando los lenguajes de educación artística: danza, artes plásticas, teatro y música, con la intención de enriquecer la sensibilidad, creatividad e imaginación de las niñas y los niños, motivándolos hacia el hábito de la lectura y el fortalecimiento del proceso de escritura. A esta estrategia la nombré “Manos a la obra” y es la parte medular del presente escrito donde comparto la experiencia que me ha permitido cosechar muy buenos frutos tanto en el ámbito de la apreciación artística, como en el proceso inicial de lectura y escritura.
NAVEGANDO EN LA CREATIVIDAD
¿Cómo inicia la aventura?
La propuesta surge hace casi tres años cuando atendía primer grado y decidimos realizar un círculo de lectura, sin embargo, aunque leíamos el libro de cada mes, no obtenía los resultados esperados de motivación y gusto hacia los libros por parte de los alumnos, hasta que un mes nos tocó leer el texto “Pintar con las manos” y una niña comentó ¿y qué tal si lo hacemos, maestra? Me pareció una muy buena idea y los niños elaboraron dibujos pintando con las manos, fue una actividad muy significativa, y el inicio de muchas más.
A partir de ese momento comencé a poner en práctica la estrategia ¡Manos a la obra!, la cual tiene como propósito: Que las alumnas y los alumnos desarrollen su apreciación del arte y se expresen artísticamente a partir de la lectura del libro de cada mes. Cabe destacar que la educación artística abre las puertas a un enorme y maravilloso mundo creativo, dotando al alumno de mayor seguridad en su expresión, creatividad, curiosidad y desarrollo cognitivo, ya que se intensifica el aspecto sensorial.
¿Cuál es el rumbo?
Como su nombre lo indica, la estrategia consiste en cuestionar al grupo, después de la lectura del libro de cada mes, sobre ¿qué se te ocurre?, con la intención de rescatar una actividad artística para cada libro que posibilite la apreciación del arte, al tiempo que actúa como motivador de lectura y escritura, la dinámica es la siguiente:
Y AHORA…¡MANOS A LA OBRA!
¿Qué necesito para viajar?
Para realizar estas actividades se requiere una amplia gama de recursos, entre los que destacan los libros, no obstante, se emplean muchos materiales de fácil acceso como hojas,
cartulinas, colores, crayones, pintura vinílica, pinceles, ropa, tela, estambre; otros que pueden obtenerse del medio, como piedras, ramas, hojas secas; asimismo, se rescatan los de reciclaje, entre los que destacan botellas de plástico, cajas, cartón; y, finalmente, los que pueden elaborarse, como los títeres.
A viajar con los libros…¡y el arte!
El momento más significativo es precisamente la expresión de arte, a continuación presento algunos de los textos leídos y las producciones realizadas a partir de ellos, mismas que han permitido a los niños aprender a ver la lectura no sólo como un medio para obtener información sino para divertirse a través de la creación:
Me gustó el viaje… ¿a quién invito a navegar?
Estos son algunos ejemplos de la capacidad de creación que tienen los alumnos, a quienes les gusta compartir lo que hacen, para lo cual empleamos tres espacios principalmente: el aula, para exposiciones; el patio, para compartir cantos y poesías; el escenario escolar, para las representaciones. Aunque también visitamos otros salones para representaciones con títeres, así como la escuela y la comunidad, para la promoción de carteles y comunicación de resultados obtenidos.
LOGROS EN EL VIAJE
Esta actividad, realizada durante más de dos ciclos escolares, ha favorecido la expresión artística del grupo, al tiempo que su convivencia y su nivel de lectura y escritura, ya que tienen la posibilidad de crear a partir de un libro. Las niñas y los niños se muestran curiosos ante nuevos y diferentes tipos de texto, motivados hacia la escritura y, por supuesto, su sensibilidad, visión estética y capacidad de creación ha aumentado. También se han obtenido buenos resultados en cuando a interacción, no sólo con sus compañeros de grupo, sino también con los demás miembros de la comunidad escolar, lo anterior como resultado de un trabajo colaborativo que favorece su autorregulación.
Como experiencia personal puedo decir que esta actividad resultó muy gratificante porque en ocasiones no se da a la lectura el tiempo suficiente para que los alumnos puedan desarrollar sus estrategias de comprensión y se pierde una oportunidad maravillosa que es su imaginación, sus ganas de hacer, de emplear la lectura para algo más que los lleve a comprender y recordar lo que leen, especialmente, a reconocer que los libros no son para tenerlos guardados en estantes sino para dialogar con ellos, viajar con la imaginación a mágicos mundos de arte, poner ¡manos a la obra! y… aprender cada día más.
Y porque el gusto por la lectura comienza desde casa, aquí te dejamos estos tips para aconsejar a los padres de familia sobre cómo fomentar la lectura en los niños.